El teletrabajo

El teletrabajo nos da una libertad que muchas personas valoramos: trabajar desde casa. Pero con esta libertad también vienen ciertas responsabilidades, especialmente en lo que respecta a la privacidad y la protección de datos personales.

Cuando trabajamos fuera del entorno controlado de la UMH, nos enfrentamos a riesgos que pueden comprometer tanto la información de la universidad como la nuestra. Por ejemplo, el uso de dispositivos USB o discos duros externos sin verificar su procedencia puede introducir malware  en el equipo, lo que podría permitir el acceso no autorizado a documentos importantes . O, simplemente, un descuido, como dejar documentos confidenciales a la vista de otras personas , podría poner en peligro la privacidad.

Por eso, me gustaría recordaros algunos consejos básicos para trabajar con tranquilidad y seguridad :

✅ Protege tu conexión: Usa siempre la conexión corporativa para acceder a los recursos de la universidad . Es como construir un puente seguro entre tu casa y la UMH .

✅ Bloquea tu equipo: Si te levantas a por café  o necesitas un descanso, recuerda bloquear tu pantalla. Es un gesto sencillo, pero poderoso .

✅ Mantén tus datos bajo llave: Tanto los documentos físicos como los digitales deben guardarse con cuidado . Nunca sabemos cuándo pueden caer en las manos equivocadas .

✅ Evita los atajos peligrosos: Como guardar contraseñas en un bloc de notas o usar claves simples . Usa gestores de contraseñas para mantener todo bajo control y a salvo .

En el teletrabajo, la seguridad es una responsabilidad compartida . Al seguir estas recomendaciones, no solo protegemos a la UMH, sino también a nosotras y nosotros mismos , y a quienes finalmente se ven beneficiadas y beneficiados: las personas interesadas .

Y hablando de estar seguras y seguros, el teletrabajo nos permite cierta comodidad, pero no olvidemos mantener una imagen profesional, sobre todo en videollamadas . Porque, aunque nadie pueda ver si llevas zapatillas , una camiseta de pijama «accidentalmente» captada por la cámara  puede ser una anécdota que tus compañeras y compañeros no olvidarán fácilmente. Así que, si me permitís una última recomendación, antes de encender la cámara, aseguraos de que la seguridad no sea lo único que está en orden .